lunes, agosto 21, 2006

El 1º cumpleaños.

Ya pasaron 12 meses desde aquel día en que por primera vez le vi la carita a Fede... 12 meses desde el momento en que lo tuve en mis brazos... por primera vez.

Eran aproximadamente las 2hs de la madrugada del 21 de agosto de 2005 cuando el corazón me empezó a latir a mil por horas y me dijo: "llegó el momento", lo desperté a Álvaro y comenzamos a controlar las contracciones, llamó a un taxi y nos fuimos al hospital.
Llegamos y luego de revisarme me dijeron que Fede quería conocernos, me llevaron a una sala para prepararme para el gran momento. Una vez que estaba lista, lo dejaron pasar a Álvaro. No se despegó de mi lado en toda la noche... Fede quería salir, pero mi presión se disparaba y no lo dejaba... me dieron medicación para bajar la tensión y seguimos esperando.
A las 12hs del mediodía vino la jefa de guardia y después de verme dijo: "Vamos que lo sacamos sin problemas"... el corazón se me aceleró sabiendo lo que venía, estaba preparada para verlo... Álvaro estaba afuera, no lo dejaban entrar hasta que no fuera el momento exacto... Y FUE... entró Álvaro a la sala de parto y al verlo sentí que lo quería todavía más (si es eso posible)... empujé sólo 3 veces y me avisaron que levantara la cabeza.... eran las 12:35hs y ahí estaba Fede... con sus 3,370kg y con 52cm... lo envolvieron y mientras lo llevaban a que el médico lo revisara escuché el mejor sonido que jamás había escuchado antes, el llanto de mi bebé! Pagaría por repetir ese momento!
Y luego la tranquilidad... escuchar al pediatra decir: "Está muy bien!" cómo no iba a estarlo si era guapísimo y qué pulmones tenía!!! pero el llanto cesó, se calmó cuando me lo pusieron en brazos y con el papá no podíamos dejar de llorar y de reírnos a la vez... y lo primero que le dije fue "HOLA, MI AMOR... TE QUIERO". No dejaba de acariciarle la carita y las manitos, chiquitas, inquietas. Y tuvieron que sacármelo y lo dejaron en su cuna, Fede sabía que mamá estaba ahí y que siempre estaría por eso no lloraba, estaba tranquilo esperando que lo abrazara de nuevo... con unos ojazos inquietos que miraban todo lo que lo rodeaba... Hasta las enfermeras se sorprendían de lo tranquilo que estaba, y por qué no iba a estarlo? si ya nos tenía a nosotros para cuidarlo siempre!

Álvaro tuvo que salir y cuando terminaron de curarme me llevaron a la pieza con Fede acostadito al lado mío. Y en la sala comió por primera vez, qué hambre tenía!!! Sabía perfectamente lo que tenía que hacer y me enseñaba a mí cómo quería ponerse!
Y más tarde llegó Álvaro casi sin comer y sin dormir, pero no había lugar para el cansancio, ni para el hambre, la alegría de tener a su hijo en brazos era mucho más fuerte. Igual que mi alegría de verlos a ellos juntos por primera vez... de ver que el sueño de toda mi vida se había hecho realidad... abrazar a mi hijo.
Era domingo, y hasta el miércoles Álvaro no se separó de nuestro lado, sino sólo para venir a casa a ducharse y a comer...


El miércoles nos dieron de alta, vinimos a casa, y empezamos un nueva vida:
NUESTRA VIDA EN FAMILIA.

No hay comentarios: